La materia prima de cualquier institución financiera son sus clientes. Sin clientes no existen
tareas que desarrollar y sin trabajo su institución financiera, unión de crédito, servicio
financiero, despacho de contadores o banco encontrará muchísimos problemas para crecer y sobrevivir.
Hoy en día no basta con tener un sitio web u ofrecer banca en línea (para los bancos), pues el que
un cliente se decida por una u otra firma se debe, en mucho, a la experiencia que tiene con ésta, a
las recomendaciones y comentarios que se encuentran en sitios web (como las, aún en estos días,
llamadas telefónicas de servicios financieros).
Contar con un marketing basado en estrategias de 360 grados es indispensable para cubrir todos los
puntos de contacto disponibles, a fin de coordinarlos y que no existan discrepancias entre uno y otro.